BAÑATE EN LA MAGIA .- Trabajo Diario y Ejercicios de luz
curar al niño interior
La energía del día nos invita a *curar al niño herido que habita en nuestro interior*.
Nos inspiraremos en un texto de *Thich Nhat Hanh*, monje budista, padre de Mindfulness, quien trascendió el 22 de enero del 2022..
*Muchos de nosotros tenemos aún un niño herido, viviendo en nuestro interior.*
Quizá las heridas nos las hayan producido nuestro padre o nuestra madre. O tal vez, a nuestro padre le hirieran de niño. A nuestra madre también pueden haberla herido cuando era niña. Como no supieron curar las heridas de su infancia, nos las han transmitido.
*Si nosotros no sabemos transformar y curar las heridas que hay en nosotros, las vamos a transmitir a nuestros hijos y nietos.*
Por eso, hemos de volver al niño herido que hay en nosotros y ayudarle a curarse. A veces, el niño herido que hay en nosotros necesita nuestra atención. Ése niño pequeño puede aflorar de las profundidades de nuestra conciencia; y pedir, nuestra atención. Si eres consciente, oirás su voz pidiendo ayuda. En ese momento, en lugar de contemplar un bello amanecer, vuelve a ti mismo y abraza tiernamente al niño herido que hay en ti. «Inspirando, vuelvo con el niño herido que hay en mí; espirando, cuidaré muy bien de mi niño herido».
*Para cuidar de nosotros mismos, debemos volver y cuidar del niño herido que hay en nuestro interior.*
Debemos practicar cada día el volver a tu niño herido. Debemos abrazarlo tiernamente, como si fueras un hermano o una hermana mayor. Has de hablarle. Y también, puedes escribir una carta al niño pequeño que hay en ti, de dos o tres páginas, para decir que reconoces su presencia y que harás todo lo posible para curar sus heridas.
*Cuando hablamos de escuchar con compasión, normalmente creemos que se refiere a escuchar a otra persona.*
Pero también debemos escuchar al niño herido que hay en nuestro interior. Está en nosotros aquí, en el momento presente. Y podemos curarlo ahora mismo.
_«Mi querido niño herido, estoy aquí por ti, listo para escucharte. Por favor, cuéntame tu sufrimiento, muéstrame todo tu dolor. Estoy aquí, escuchándote de veras.»_
Y si sabes volver a él, escucharle cada día durante cinco o diez minutos, la curación tendrá lugar. Cuando subas una bella montaña, invita al niño que hay dentro de ti a subir contigo. Cuando contemples una hermosa puesta de Sol, invítale a disfrutarla contigo. Si lo haces durante algunas semanas o meses, el niño herido que hay en ti se curará. La plena conciencia es la energía que puede ayudarnos a hacerlo.
*EJERCICIO DE ATENCIÓN PLENA:* Hago conscientemente *20 RESPIRACIONES CONECTADAS* disfruto de mi silencio y coopero con mis sentidos para sincronizarme con mi sabiduría interna, *y darme cuenta que mi presente puede ser una consecuencia de cómo me relaciono con mi “niño interior herido”*.
*Ejercicio de escritura. 3 minutos.*
¿Cómo me llevo con mi *niño interior herido*? ¿Lo atiendo o lo tengo en el olvido?
________________________________
________________________________
________________________________
*Ejercicio de inmersión amorosa. 3 minutos.*
Me visualizo conviviendo con “mi niño interior herido”… lo escucho, lo abrazo, lo invito a disfrutar la belleza de la vida.
¿Qué siento?
___________________________