La energía del día nos invita a *respetar el libre albedrío de los demás*.
Nos inspiraremos en un texto compartido en *grupos de espiritualidad*.
*SI NO QUIERE VER, NO INSISTAS EN ENCENDERLE LA LUZ*
Cuántas veces hemos querido
que quienes amamos “vean” lo mismo
que nosotros estamos viendo o viviendo…
Aunque sea un proceso “fuerte y duro”,
debemos aprender y entender
que para “amar” hay que dejar de “querer controlar”.
“Si no quiere ver,
no le enciendas la luz,
dañarás sus ojos.
Si no quiere escuchar,
no levantes la voz,
lastimarás su conciencia.
Si no quiere caminar,
no proporciones apoyo,
sangrarán sus pasos.
Su despertar no es tuyo,
es exclusivamente suyo.
Si en algún momento hiciste
de su dolor tu dolor, suelta,
no te pertenece.
Sé amorosamente egoísta,
silenciosamente paciente,
amigablemente distante.
No te pierdas en ello.
Re-encuéntrate y alégrate,
porque tú sigues siendo tú.”
*EJERCICIO DE ATENCIÓN PLENA:* Hago conscientemente *20 RESPIRACIONES CONECTADAS* disfruto de mi silencio y coopero con mis sentidos para sincronizarme con mi sabiduría interna, *y darme cuenta que requiero crecer de adentro a hacia afuera, mi alma es mi gran maestra*:
*Ejercicio de escritura. 7 minutos.*
No hay ser humano que puede ayudar a quien no quiere ayuda.
¿A quien quiero rescatar una y otra vez, sin reacción favorable por parte de la otra persona?
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*Ejercicio de inmersión amorosa. 3 minutos.*
Permito que mi inocencia sea la que vea mi vida, nueva y sin límites. Me concentro en mi propia evolución y la armonía me acompaña.
¿Qué sentí?
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